24 jul 2013

Enseñar los dientes


Buscando un certificado de empadronamiento, que finalmente no he encontrado, he visto esta radiografía de mis dientes en 1997, cuando aún tenía las muelas del juicio, también se ve el colmillo de leche y el nuevo  colmillo apuntando para salir, pero después de 16 años aún no se ha decidido, debe ser lento o listo y no quiere tener que masticar todos los días. 
No me gusta enfadarme, sacar las uñas, ni enseñar los dientes, pero a veces es necesario, al principio te invade una sensación muy desagradable, incómoda y mala, pero si consigues llevar la conversación a un punto tranquilo de nuevo, te quedas mucho mejor que incubando pensamientos monologados que se contestan a sí mismos, dándose la razón como a los tontos,  sin ninguna réplica externa. Así que mostrando el enfado, das la oportunidad de que te pidan perdón o no lo hagan y te saquen de tu error ombligariano, con mi hermana L es muy fácil enfadarse, pero también es muy fácil desenfadarse después ;)

2 comentarios:

  1. no nos pareció bastante y repetimos hoy; nos debía haber quedado alguna muela oculta sin enseñar. A pesar del daño de estas extracciones, siempre me queda el silencio interior de cuando uno aprende algo nuevo, dejo de buscar y comprendo; gracias por tus lecciones.

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  2. Yo también aprendo mucho hablando y mirando las cosas desde tú visión. A ver si aprendemos a hacerlo sin extracciones dolorosas... ;)

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