Un blog se escribe desde donde se vive, a veces un quinto sin ascensor, la cola del paro, las musarañas o los desengaños. En la felicidad se escribe menos, pero se vive más, tampoco es siempre así, ni todo lo contrario. Tampoco siempre se escribe desde la distancia adecuada.
las manos alcanzan.
ResponderEliminarA veces hay que irse para tener ganas de volver. No te vayas mucho ni muy lejos.
ResponderEliminarNo me puedo separar mucho de lo que llevo dentro de mí (ni quiero)
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