Un blog se escribe desde donde se vive, a veces un quinto sin ascensor, la cola del paro, las musarañas o los desengaños. En la felicidad se escribe menos, pero se vive más, tampoco es siempre así, ni todo lo contrario. Tampoco siempre se escribe desde la distancia adecuada.
siempre me das qué pensar, gracias por volver
ResponderEliminarQué bonito...me gusta esa mezcla de sensaciones...
ResponderEliminar