Después de una semana de vacaciones, vuelta a la vida, jaja. Ayer termine Sexo en Nueva York, que pena, es como cuando te acabas un libro de 1000 paginas que te está encantando y al llegar a la página 900 quieres ir más despacio para disfrutarlo y que no se acabe nunca.

Cuando tengo tiempo libre duermo mucho, no se si es un síntoma de que estoy un poco depre, o que me encanta estar en la cama y que ni en vacaciones puedes sentirte a gusto en la cama merodeando por culpa de esta educación cristiana de la culpa y el sacrificio.

Queda muy poco para la navidad, de momento no me apetece mucho, pero luego siempre me lo paso bien en el fondo estar rodeado de escandalera y gente me encanta. Los anuncios de perfumes me inspiran, esas mujeres con caras de piel nordica, de frío, de emoción mirando a un horizonte con niebla y el París fotogénico de fondo, la navidad tambien está hecha de eso, y de las pocas luces que han puesto este año por eso de la crisis, y de la ecologia, las luces me gustaban igual que me gusta beberme la quinta cerveza aunque sepa que no me siente bien beber tanto.