20 may 2014

Cuenca

Es raro volver a escenarios muy vividos desde el futuro, cuando eres ya un poco otro y esos sitios significan para ti también otras cosas. Esta mañana he estado en el lugar donde pasé trabajando tantos años, pero era una extraña allí, moviéndome torpe entre las mesas que yo decidí como colocar. También llevo unos días durmiendo de nuevo en mi casa, después de tres años de fugaces visitas a esta ciudad. Esta ciudad que he sentido tan mía y en la que decidí  hace unos años quedarme a vivir, hacer mi pequeño nido. Ahora la casa está vacía de cosas, de libros, solo quedan los muebles vacíos como bocas hambrientas, las puertas que tardé tanto en pintar de blanco y esa luz con la que me gustaba desayunar mirando por la ventana con los ojos entrecerrados.
Supongo que necesito un paseo por la hoz, o sentarme en el castillo, mirando desde arriba la ciudad. Sentarme en "la roca de pensar" porque pasen los años que pasen ella sigue ahí, siempre igual, mirando indiferente a los que pasan, vuelven y se vuelven a ir.

1 comentario:

  1. ...esa luz con la que te gustaba desayunar seguro que va siempre contigo...

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